Sentir y Gustar: Perdonar es comprender

Imagen de Genaro Ávila-Valencia, SJ
Genaro Ávila-Valencia, SJ

En nuestros intentos por amar,

a veces terminamos por dañar.

Quizá no por alevosía,

ni por traición, ni por deslealtad;

casi siempre, más bien, por fragilidad.

El amor a veces duele,

porque no nacemos sabiendo amar.

Se trata de un arte difícil

que hay que en todo tiempo practicar,

con firme, valiente y determinada voluntad:

Aprender, ensayar, intentar y procurar…

una vez y otra vez sin descansar.

Cuando el amor duele

es porque una herida causó sin pensar;

Es el momento entonces de perdonar.

Pero ¿Qué cosa es el perdón?

Perdonar no me parece que sea olvidar,

sino, más bien, con cierta paz recordar.

Conocer nuestros límites

y el de los demás;

Perdonar es comunicar.

Perdonar también es compasión,

y es, sobre todo, comprender:

que nuestro corazón es de carne,

que nuestra voluntad es de cristal,

que nuestro ego es una filosa roca

y que nuestra memoria es fatal:

Aguda para recordar lo malo

y muy diligente para lo bueno olvidar.

Sí, perdonar es comprender

que nuestro corazón puede fallar.

Que nuestro amor es imperfecto

pero que quiere intentar,

que nuestra sensibilidad está herida

pero que no quiere dejar de abrazar.

Sonreír con dulzura

y con paciencia saber esperar.

Aprender con mucho esfuerzo

que el amar es intentar

e ir más allá de la ofensa:

para perdonar y reconciliar.

Compartir

Un comentario

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos relacionados

Sentir y Gustar: ¡Ten paciencia conmigo!

Señor, ¡ten paciencia conmigo! A veces lo que pienso tan lúcidamente y lo que digo tan elocuentemente, no coinciden con

La Certeza de un encuentro Final Maravilloso

Hace unos días estuvimos en casa de mi primo y su esposa, quienes en cierto momento nos compartieron la dolorosa

Sentir y Gustar: Perdonar es comprender

En nuestros intentos por amar, a veces terminamos por dañar. Quizá no por alevosía, ni por traición, ni por deslealtad;

Hablemos de las dificultades que tiene la ciencia para asumir las asombrosas ideas que surgen de su propio desarrollo

“El punto de partida de mis reflexiones es la asombrosa profundización y ampliación de nuestra visión del mundo provocada, tanto

Sentir y Gustar: Juntos

Aquí estoy, Señor. Tuya soy. Dispuesta a entregarme a tu misión, así lo quiero y deseo. Si el rumbo de

Cartas al cielo: A solo una respiración de distancia

Esta mañana me regalaste una gran luz en la oración. Me mostraste que puedo abandonarme en ti, en este instante,