Hablemos de la felicidad

Imagen de P. José Raúl Arbeláez, SJ
P. José Raúl Arbeláez, SJ

El hombre ha sufrido y sufre todo género de martirios; sus instituciones son los altares que construyó para llevar a ellos sus sacrificios cotidianos, maravillosos en cuanto a calidad, asombrosos en cuanto a cantidad.

Todo ello estaría absolutamente desprovisto de sentido y sería imposible de soportar si el hombre, al propio tiempo, no sintiera en sí esa profunda felicidad del alma, que pone su divina fuerza a prueba de sufrimiento y demuestra, por medio de la renunciación, su inagotable riqueza. Sí, los peregrinos vienen, todos vienen a tomar posesión de ese mundo, que es su verdadera herencia. Continúan agrandando su consciencia, buscando una unidad cada vez más elevada; siguen acercándose cada vez más a la verdad central, cuya unidad lo abarca todo.

Grande es la desnudez del hombre e innúmeras sus necesidades hasta que adquiere verdadera consciencia de su alma. Hasta entonces el mundo se le presenta en un continuo estado de flujo y reflujo, cual un fantasma que aparece y se desvanece. Pero para el hombre que ha hecho de su alma una realidad, el universo tiene un sentido concreto, a cuyo alrededor puede ordenarse todo el resto, y sólo entonces puede hallar y saborear la bendita felicidad de una vida armoniosa. EL CAMINO ESPIRITUAL, Rabindranath Tagore, Longseller, 2007, p. 45-46

P. José Raúl Arbeláez SJ – Equipo CIRE Ampliado

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos relacionados

Cartas al cielo: La abundancia del ahora…

Hoy amanecí con tiempo. Tengo la sensación de que no hay prisa, que todo puede hacerse con calma, sin apuros,

Sentir y Gustar: Contemplación de un Discípulo Resucitado

Llega el amanecer y Jesús sigue sin aparecer. Confío en que va a resucitar… o bueno, confiaba. Ahora tengo miedo.

Cartas al cielo: Todo lo bueno viene de lo alto

Hoy desperté con el corazón alegre, con el alma perfumada por el encuentro que ayer tuve con mi amigo Camilo.

Sentir y Gustar: ¡GRACIAS, PAPA FRANCISCO!

Gracias Papa Francisco por tu vida tan fecunda: Aún tengo vivas en mi corazón tus primeras palabras: «¡Buona sera!… Ya

Hablemos de la Ropa

El buen Dios envía sus fríos de acuerdo con la ropa de la gente. Cuando me envolví en mi abrigo,

Comunitas Matutina 13 de abril de 2025 Domingo de Ramos Ciclo C

“Por eso Dios lo exaltó y le otorgó el Nombre, que está sobre todo nombre. Para que al nombre de