Hablemos de la posibilidad de armonizar la realidad aún en medio de la tentación

Imagen de P. José Raúl Arbeláez, SJ
P. José Raúl Arbeláez, SJ

… hagan que otros crean en el Evangelio. Viéndolos a ustedes, viendo qué hacen, cómo se conducen, qué dicen, cómo sienten, cómo aman: que crean en el Evangelio. El Evangelio dice que el Espíritu llevó a Jesús al desierto, y ahí convivía entre las fieras como si no pasara nada.

Esto nos hace recordar lo que sucedió al principio: el primer hombre y la primera mujer vivían entre las fieras, y no pasaba nada. En aquel paraíso todo era paz, todo era alegría. Y fueron tentados, y Jesús fue tentado. Jesús quiere reeditar al comienzo de su vida, después de su bautismo, algo parecido a lo que fue el principio, y este gesto de Jesús de convivir en paz con toda la naturaleza, en soledad fecunda del corazón y en tentación, nos está indicando qué vino a hacer él. Vino a restaurar, vino a recrear.

Nosotros, en una oración de la misa, durante el año, decimos una cosa muy linda: “Dios, que tan admirablemente creaste todas las cosas, y más admirablemente las recreaste.” Jesús vino con esta maravilla de su vocación de obediencia a recrear, a rearmonizar las cosas, a dar armonía aún en medio de la tentación. ¿Está claro esto? EL VERDADERO PODER ES EL SERVICIO, Jorge Mario Bergoglio, S.J., Editorial Claretiana, 2013, p. 9-10

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos relacionados

Sentir y gustar: Ningún algoritmo sustituye a un abrazo

Uno de los mensajes del Papa León XIV que más me han impactado en este corto tiempo de su pontificado

Cartas al cielo – Responderte iluminó el sentido de mi vida

Ayer, en nuestro encuentro de Comunidad de Vida Cristiana (CVX), hicimos un tiempo de oración de contemplación. (Esa oración en

Comunitas Matutina 24 de agosto de 2025 Domingo XXI del Tiempo Ordinario Ciclo C

“Pues hay últimos que serán primeros, y hay primeros que serán últimos” (Lucas 13: 30) Lecturas: Las lecturas de hoy

Sentir y Gustar: ¡Ten paciencia conmigo!

Señor, ¡ten paciencia conmigo! A veces lo que pienso tan lúcidamente y lo que digo tan elocuentemente, no coinciden con

Cartas al cielo – La Certeza de un encuentro Final Maravilloso

Hace unos días estuvimos en casa de mi primo y su esposa, quienes en cierto momento nos compartieron la dolorosa

Sentir y Gustar: Perdonar es comprender

En nuestros intentos por amar, a veces terminamos por dañar. Quizá no por alevosía, ni por traición, ni por deslealtad;